No me lo podía creer. ¡Había conseguido dos entradas para un concierto de Demi Lovato! Estaba eufórica, porque además de haberlas conseguido, había sido por suerte, ya que estaban agotadas y por Internet encontré a alguien que las vendía, así que imaginaos lo contenta que estaba... Era increíble. Llamé a una de mis mejores amigas para contárselo.
- ¡Icía! ¡He conseguido entradas para el concierto de Demi Lovato en Madrid!
-¿Qué dices? -su voz sonaba realmente sorprendida- ¿Cuántas entradas?
- ¡Dos! Es en Madrid, ¡vente!
- Por mi por supuesto que voy, voy a preguntarle a mis padres.
Esperé un rato al teléfono y volvió a cogerlo.
- ¡SÍ QUE PUEDO! -su voz sonaba altísima, gritó tanto que casi me revienta el tímpano.
- ¡Genial! Entonces cogeré los billetes de avión y mañana nos vamos. El concierto es dentro de tres días.
- ¡Haré las maletas! -sonó una pequeña risita.
- Igualmente, tendré que asegurarme de que las entradas están bien guardadas.
- Eso, que no vaya a ser que nos quedemos sin ellas justo al llegar.
- Bueno, voy a ir preparando las cosas. En cuanto tenga los billetes de avión te llamo. Adiós.
-Chao, hasta luego.
Colgué y empecé a coger mi mejor ropa del armario y a ponerla encima de la cama. Busqué mi maleta, la abrí lo más rápido que pude y empecé a meter la ropa doblada dentro. Metí las entradas que me habían enviado a casa dentro de la cartera, no quería perderlas por nada del mundo.
Cuando terminé de hacer la maleta, cosa que me llevó sólo diez minutos por la histeria y la rapidez que llevaba encima, me conecté a Internet para comprar los billetes de avión. No daba encontrado los que quería para Madrid, hasta que mi madre me indicó dónde tenía que mirar, cosa rara en ella, que no sabe mucho de internet. Después de comprarlos, llamé a Icía.
- ¡Hola! Ya he comprado los billetes y he hecho la maleta. Estoy que no puedo más de la emoción.
- A mí aún me tiemblan las piernas, ¡estoy nerviosísima!
- Pues porque aún no sabes ésto: ¡las entradas son de primera fila!
- ¿Por Internet y de primera fila? A ver si va a ser un timo...
- Que no... Que mi padre las ha comprobado y son de verdad, así que no te preocupes.
- Eso espero... Por cierto, ¿las has guardado bien?
- Sí, tranquila, están en mi cartera, y la cartera está en mi bolso, y mi bolso siempre lo llevo conmigo, así que están a salvo.
- Bueno, pues entonces mañana por la mañana nos vemos. ¿Para qué hora son los billetes?
- El avión sale a las cuatro de la tarde, podemos comer juntas en el aeropuerto.-solté una pequeña risa.
- Genial, bueno pues mañana me paso por tu casa y vamos juntas para allá.
- Estupendo, hasta mañana.
-Adiós.
Ahora sólo había que esperar hasta el día siguiente... No sería tan difícil, eran las 19:30 de la tarde, así que no quedaba tanto, y la noche estaría dormida... Bueno, eso si conseguía hacerlo.
